Lo que necesitas saber:
Platicamos con el legendario Brian Eno y la artista conceptual Beatie Wolfe sobre el lanzamiento de sus nuevos discos 'LATERAL' y 'LUMINAL'.
¿Alguna vez has sentido una mezcla de alegría y desesperación, como si no pudieras decidir si estás feliz o triste? Brian Eno y Beatie Wolfe creen que la música puede hacerte sentir eso y más, creando un soundtrack emotivo con sensaciones únicas y sin una definición clara.
Apenas la semana, este par de mentes creativas lanzaron Luminal y Lateral, dos álbumes colaborativos que nacen de su interés compartido por el arte, el medio ambiente, los sentimientos que aún no tienen nombre y, sobre todo, una curiosidad insaciable de ambos artistas.
Eno, pionero de la música ambient y experimentador sonoro por excelencia, conoció a Wolfe, cantautora e innovadora musical, cuando ambos participaron en una charla sobre “Arte y Clima” en el festival SXSW que pueden checar por acá. No fue una charla cualquiera: fue elegida como una de las mejores del evento en los últimos 25 años.
Desde esa charla, decidieron no parar y Eno y Wolfe, se pusieron a hacer música sin presión, lo que se consolidó en dos discos paralelos que sirven como acompañamientos y se complementan.
Así que Luminal y Lateral no son simplemente discos. Son espacios sonoros donde podemos sentir cosas que tal vez nunca habíamos sentido, o que no sabíamos cómo nombrar. Y eso, en un mundo cada vez más rápido y ruidoso, es un acto de resistencia sensible, en el que ambos eligieron una serie de sentimientos según el comunicado del álbum, que enlistamos aquí:
- Ailyak (búlgaro): ir despacio, disfrutando del proceso.
- Dor (rumano): una mezcla de anhelo, nostalgia y pertenencia.
- Duende (español): esa chispa inexplicable que te eriza la piel.
- Meraki (griego): entregarse por completo a lo que uno ama.
- Ya’aburnee (árabe): el deseo de morir antes que la persona amada, porque no se soportaría vivir sin ella.
- Sisu (finlandés): determinación inquebrantable.
Una plática con dos mentes creativas asombrosas
A propósito del lanzamiento de Luminal y Lateral, platicamos con Brian y Beatie. Acá la plática con estos inmensos artistas:
sopitas.com: He escuchado ambos álbumes, gracias por la música. Me intriga el papel que tiene el álbum hoy en día. En una época en la que vivimos en una sociedad que prioriza la velocidad, la gratificación instantánea y el contenido sin fin, su álbum invita al oyente a una experiencia mucho más lenta y contemplativa. ¿Fue intencional ese contraste? ¿O cómo esperan que los oyentes se relacionen con el álbum dentro de este clima cultural acelerado?
Brian Eno: “Es cierto que todo va cada vez más rápido, pero también es verdad —aunque se note menos— que otras cosas van cada vez más lentas. Por ejemplo, hay muchas personas interesadas en experiencias donde aparentemente no ocurre gran cosa por un buen rato. Recuerdo un canal de televisión noruego que durante un par de años transmitía diariamente un programa largo donde simplemente se mostraba el recorrido de un tren. No había comentarios ni narrativa: solo la vista desde la ventana del tren atravesando el campo. Cientos de miles de personas lo veían.”
“Existen muchas cosas así, pero el dinero está en la velocidad. Si quieres hacer mucho dinero, haces cosas que la gente consume rápidamente y luego quiere más. Como McDonald’s, por ejemplo. ¿Recuerdas que solían tener esos asientos incómodos para que la gente comiera su hamburguesa y se fuera rápido? El modelo de negocio para hacer dinero se basa en la rapidez y el cambio constante.”-
“Lo que las personas realmente quieren no es lo mismo que las empresas quieren que deseen. Y como resultado, esas cosas no reciben tanta atención ni promoción, porque no forman parte del juego del dinero. Esa es mi teoría. Puede que no sea cierta. Muchas de mis teorías no lo son, pero es la que estoy usando hoy.”
“Desde la digitalización de la música, todo se ha acelerado, como ha pasado con todos los aspectos de la vida humana. Pero también nos ha quitado mucho: la ceremonia, lo tangible del arte, incluso una narrativa más grande. Todo se fragmentó en pequeños impactos, pequeñas canciones, y ahora todo —las noticias, la música, el arte, las redes sociales— nos llega con la misma frecuencia, como un bombardeo constante, pero sin profundidad, sin quedarse con nosotros. Y creo que esa capacidad de dejar una huella profunda es esencial, porque es cuando algo te cambia de verdad.“
“Hay un proyecto de investigación sobre música y demencia, así que he visto de primera mano su impacto medicinal en personas con Alzheimer. La música va mucho más allá del entretenimiento; es fundamental para el bienestar. Y cuando hicimos este álbum, lo hicimos por nuestro propio bienestar. No hubo una intención comercial. No pensábamos en lo que vendería más, sino en lo que realmente se sentía bien para nosotros. Y si se sentía bien, confiábamos en que otros también lo sentirían así.”
Brian Eno: “Siempre he partido de la idea de que si algo me gusta a mí, probablemente le guste a alguien más también. No creo ser tan diferente del resto como para que no haya un punto de contacto con, digamos, un 10% del resto de la gente. Y un 10% sigue siendo 800 millones de personas.”

sopitas.com: Mencionaron en los comunicados de lanzamiento que los sentimientos fueron importantes en la creación de estos álbumes. ¿Cuál fue la última emoción que les sorprendió por ser completamente nueva para ustedes?
Brian Eno: “A un nivel pequeño, tengo ese tipo de experiencias bastante seguido. Por ejemplo, anoche vi a una cantante llamada Lola Young, que tuvo un éxito el año pasado con una canción llamada Messy. Al final de esa canción, hace un baile que es a la vez muy hermoso y bastante obsceno, casi pornográfico, pero lleno de energía positiva. Nunca había sentido algo así.”
Beatie Wolfe: “También hay una palabra búlgara, aliak, que alude a hacer las cosas con placer, sin ninguna prisa. Esta mañana, mientras tomábamos té, vimos a una mujer con una bolsa que decía “crece despacio”. Es esa idea de hacer las cosas lentamente, por puro disfrute. No es un sentimiento nuevo, pero sí es particular cuando estás creando algo y de pronto aparece una fecha límite. No lo hacías pensando en que tendría que salir al mundo, simplemente lo hacías por hacerlo.”
“Hay una tensión muy interesante entre seguir disfrutando el proceso de creación por sí mismo, y darte cuenta de que, eventualmente, va a tener que materializarse. Hay que mantener esa lentitud interna, incluso cuando hay presión externa. Es un tipo de experiencia zen. Porque realmente hicimos esto para nosotros mismos. Y cuando te das cuenta de que va a tener otra vida allá afuera, es hermoso… aunque también significa que tienes que hablar al respecto, claro.”
sopitas.com: Sobre resistir en los tiempos actuales, con el clima político y social ¿Cuáles son algunos de los factores contra los que creen que, como artistas, deben luchar?
Brian Eno: “Contra aquellas cosas de las que los políticos tienen miedo de hablar. Hoy los políticos viven aterrados de los medios y de las redes sociales. Todo lo que hacen está condicionado por la pregunta: ¿cómo me va a afectar esto para ser reelegido? Así que todo se adapta a lo que creen que los medios dirán. Y esa no es una buena forma de tener conversaciones.”
“Y esto no solo aplica a los políticos, sino a cualquiera que opere en un entorno político: organizaciones, corporaciones, incluso ONGs. He visto muchas veces cómo incluso en sectores benéficos, como en los proyectos de música y demencia, muchas organizaciones quieren impulsar solo su visión, e ignoran las demás.”
“El arte te permite ser libre, actuar como un rebelde. En teoría, no tienes a nadie a quien responder. Puedes decir cosas que para otros son difíciles de expresar si forman parte de una estructura más grande. Ser un cierto tipo de artista —como Brian lo ha sido magníficamente— te da esa libertad de dedicar tu energía y trabajo a cosas que, con suerte, también pueden ser útiles para los demás.”
El resultado son dos discos que funcionan como mapas emocionales. Si no hay una palabra para describir algo, al menos ahora hay una canción. Y es que parte del espíritu de Luminal y Lateral está en reconocer que hay emociones humanas tan específicas, tan intensas, que solo otras lenguas han sabido nombrar.