Estamos a la mitad de la temporada de la NFL y las cosas se empiezan a definir para algunas franquicias. Por supuesto, solo hay ocho en la liga que pueden estar como líderes de sus divisiones, pero hay algunos que convencen y otros que pues bueno, se espera que se caigan en cualquier momento.
Por eso, estamos viendo a cuál de estos equipos sí se la compramos y a los otros de plano no.
New England Patriots: Sí
Seguro es bien difícil ser fan de los Bills, Dolphins o Jets y ver que de plano los Pats pase lo que pase no sueltan la división. Ni la suspensión de Tom Brady ni la lesión de Rob Gronkowski impidieron que sigan como los meros meros del Este.
Un récord de 7 victorias y una derrota los tiene en la cima y a menos que pase un milagro, bajarán de ahí.
Baltimore Ravens: No
¿Por qué no? Porque ahí están los Bengals y los Steelers que si somos muy honestos, tienen mucho más talento que los Ravens. Aquí ni se contemplan los Browns que van que vuelan para no ganar un solo juego esta temporada.
Cincinnati viene de semana de descanso, Pittsburgh está recuperando a Ben Roethlisberger, Baltimore tiene equipo completo y aún así no ha logrado sacarles más ventaja. Cuatro triunfos y cuatro derrotas no les va a alcanzar para quedarse con el trono del Norte.
Houston Texans: No
Aquí en el Sur la cosa es extraña. Los Texans tienen buen equipo, pero Brock Osweiler no ha sido ni la sombra de lo que se esperaba de él. Ese es el motivo principal por la que los Indianapolis Colts les pueden dar la vuelta.
Si Andrew Luck sigue jugando bien y la defensa aprieta el paso, le darán baje a Houston con la división.
Oakland Raiders: Sí
Demostraron que pueden ser una de las mejores ofensivas de toda la NFL cuando vencieron a los Broncos. Pasaron la prueba de fuego y estos Raiders van en serio. Claro, el Oeste de la AFC está complicado porque hay mucho talento, pero si hay que creerle a Oakland es porque lo han demostrado.
Derek Carr puede ser el MVP de la liga y si la defensa despierta ¡aguas con estos muchachos!
Dallas Cowboys: Sí
La clave para esta franquicia sigue siendo y será la línea ofensiva. Ezekiel Elliot y Dak Prescott fueron grandes adquisiciones, pero detrás de esos monstruos es casi imposible no correr tanto y tener una protección privilegiada.
Una sola derrota en la temporada, una división irregular y aquí la mayor pregunta es qué harán si Tony Romo está sano y listo para jugar.
Minnesota Vikings: No
Esta decisión no es fácil porque su defensa como ha jugado merece llegar al menos a los playoffs. La bronca es que vienen en caída y quién sabe si podrán reponerse, la muestra fue el partido contra los Detroit Lions que bajita la mano están levantando.
La ausencia de Adrian Peterson ya se está notando y Sam Bradford no es un mariscal que te vaya a ganar un partido solo. Y por si fuera poco, tienen mucha competencia en el Norte.
Atlanta Falcons: No
Una ofensiva espectacular con un Matt Ryan y Julio Jones parece que no será suficiente. Y acá el problema es similar al de los Vikings: tienen mucha competencia. Los Panthers se cayeron pero parece que están subiendo de nivel y los Saints siempre son un hueso duro de roer.
Su mayor debilidad es la defensa y que a veces el ataque terrestre desaparece, de ahí, están bien. Este es un no que está muy cerca del sí, pero falta que demuestre más.
Seattle Seahawks: Sí
Con este equipo la cosa es más fácil porque hay muy poca competencia. Los únicos que realmente tendrían algo que decir serían los Cardinals, pero son muy inconsistentes. Lo que le ha faltado a estos Seahawks es ataque terrestre y por el amor de dios, échenle una mano a Russell Wilson con la línea ofensiva.
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