Recientemente la alcaldesa de Sayula de Alemán, en Veracruz, Lorena Sánchez Vargas, denunció que desde que tomó el cargo hace 7 meses el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) la ha mantenido “secuestrada” a ella y a su hijo de 3 años.
Además, explica que este grupo delictivo ha tomado control de las finanzas del municipio.
¿Qué está pasado en Sayula?
De acuerdo con la entrevista de la alcaldesa para Excélsior, desde que estaba en campaña política a la morenista se acercaron personajes que le dijeron que le darían protección debido a los niveles de violencia que se registran en el estado.
Pero luego estas personas empezaron a amenazarla y comenzaron a influir en sus decisiones personales.
Explica que al inicio de la administración estas personas, de un grupo criminal, le impusieron al secretario de obras y al tesorero municipal. Además, también se apoderaron de las claves electrónicas y la chequera del municipio.
Afirma que a ella le pidieron firmar varios cheques en blanco y que se negó a hacerlo por consejo de su secretario particular, Octavio Acosta. Este personaje fue asesinado el 27 de febrero de 2022.

Explica que todos sus movimientos están vigilados en todo momento y que logró escapar cuando vino a la Ciudad de México con el pretexto de acudir a la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes. Pero que su hijo de 3 años está secuestrado y que su familia ha recibido también amenazas de muerte.
Ahora está oculta y pide ayuda al gobierno federal.
¿Cuál es la respuesta de las autoridades?
El gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, afirmó que se abordó el tema durante la reunión de la Coordinación Estatal para la Construcción de la Paz y que ya están atendiendo el caso.
Señaló también que ya hay una denuncia por estos hechos y que debe preservar la integridad de la persona que está en riesgo por lo que no daría más información.

Pero no todos en el ayuntamiento de Sayula están de acuerdo con esta denuncia.
Poco después que se hizo pública esta denuncia, el ayuntamiento emitió un comunicado en sus redes en el que se niega la versión de que el hijo de la alcaldesa esté secuestrado.
El texto afirma que el 29 de julio la presidenta salió rumbo a la Ciudad de México con su chofer y escolta, así como secretaría y fotógrafo. Explican que al llegar al Senado la alcaldesa dejó tirados a sus colaboradores, quienes estuvieron por una semana esperándola.
Señalan que durante ese tiempo “se la pasó inventando denuncias” y afirman que hasta bloqueó las cuentas del Municipio en un intento de sacar dinero. Agregan que poco tiempo después que ella saliera de Sayula su hermano recogió a su hijo y a su niñera de su casa y se los llevó.

“Se afirman que estas acciones de la alcaldesa son producto de su molestia ya que no se le ha permitido saquear las arcas, y meter a nómina a todos sus parientes, como ella lo esperaba, en su sueño de volverse millonaria al acabar la administración”, se lee en el comunicado del Ayuntamiento.