Sí, tenemos que confesar que hemos estado viendo bastantes películas de detectives en los últimos días (y acá les tenemos varias recomendaciones bien chidas). Además, como medio mundo, estamos un poquito clavados con Benoit Blanc, el increíble personaje de Daniel Craig en el estreno de ‘Glass Onion’ para la franquicia de ‘Knives Out’, pero fuera de coto… esta noticia sí está sospechosa.
Resulta que murió un millonario ruso en condiciones, digamos, extrañas.
Además, no era cualquier millonario. Se trataba de Pavel Antov, un magnate que había creado un emporio de salchichas valuado en 140 millones de dólares. Era político, encabezaba las políticas agrarias en Rusia y recientemente, detalle importante, había criticado el actuar de Vladimir Putin en la guerra de Ucrania.
La sospechosa muerte del magnate de salchichas
Si no nos creen que parece que les estamos contando una novela de detectives, espérense a escuchar las extrañas circunstancias de la muerte de Pavel Antov.
La versión oficial es que cayó de la ventana de un hotel de lujo en el distrito de Rayagada, en la India.
Sin embargo, la cosa es mucho más complicada. De acuerdo con la BBC, el magnate —de 65 años— estaba celebrando su cumpleaños en este viaje. Salió únicamente con cuatro personas, todos originarios de Rusia. Unos días antes, el viernes, uno de sus acompañantes murió, también en el hotel, se llamaba Vladimir Budanov.
En una entrevista con los medios, el superintendente de la policía comentó que los casos no estaban conectados.
Dijo que Budanov murió el viernes por culpa de un infarto y acusó que había consumido grandes cantidades de alcohol. La policía, entonces, señaló que el magnate de las salchichas, Antov, se había “deprimido” por la muerte de su compadre, lo que ocasionó su muerte dos días después.
En los medios de Rusia —particularmente la agencia TASS— la muerte de Antov ha sido reportada como un accidente, al caer de la ventana. En una breve declaración, el cónsul ruso en Calcuta, también la India, dijo que “no había ningún elemento criminal en estos trágicos eventos”.
La cosa es que este caso se pone todavía más complicado.
Pavel Antov había caído en el escándalo hace algunas semanas porque se filtraron sus conversaciones de WhatsApp en las que criticaba la guerra de Rusia en Ucrania. En el momento escribió que las acciones de su país eran “difícil llamarlo cualquier cosa, excepto terrorismo”.
Se defendió diciendo que él no había publicado el mensaje, que había sido una confusión y que él se mantenía como “un patriota de su nación”.
La BBC señala que la muerte del magnate de las salchichas Pavel Antov es, además, una serie de extrañas muertes en personajes de alto perfil en Rusia. Recordemos que hace unas semanas murió un funcionario al caerse de un barco o el atentado contra Darya Dugin, hija del filósofo ruso Alexander Dugin, cercano a Vladimir Putin.
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